Un millón de palabras



Una lista congelada de absurdos que ni siquiera se esfuerzan en cobrar sentido.

Un millón de palabras, de gestos, de sonrisas, que nunca serán otorgadas.

Un constante querer.
Un nunca poder, un nunca atreverse.

Un de repente y un ojalá.
Un batido de ambos.
Un no me apetece.
Un no sé llorar.


Un adiós que siempre significa hasta luego.
Un sin ti no sé soñar.


Mezclas quizás y siempres,
repites menos y quieres más.

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